Los atletas pusieron a prueba sus límites en competiciones justas. Además de la ambición deportiva, el espíritu de equipo y el juego limpio estuvieron también en el centro de los torneos. Los espectadores animaron con entusiasmo a sus compañeros y crearon un gran ambiente en el pabellón deportivo.
Al final, los representantes de las clases recibieron sus certificados en una ceremonia de entrega de premios en la que se honró debidamente a los mejores equipos.