La noche del 9 al 10 de noviembre de 1938 es uno de los momentos más oscuros de la historia alemana: más de 1.000 sinagogas e innumerables comercios pertenecientes a alemanes judíos fueron atacados y destruidos. Como preparación para este aniversario, los alumnos de la clase 10e limpiaron las lápidas de algunos judíos residentes en Gronau. Esto permitió restaurar la legibilidad y el brillo de las piedras con motivo del Día del Recuerdo.
El 9 de noviembre de cada año se celebra en Gronau un acto conmemorativo en el que este año participarán alumnos de la clase 10c.
El proyecto "Piedras de tropiezo" fue lanzado en 1992 por el artista Gunter Demnig. Quería devolver su nombre a las víctimas nazis, que no eran más que un número en los campos de concentración.